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Consejos para ahorrar electricidad en el hogar

Ahorrar electricidad en casa no es sólo una cuestión de salvar el planeta (lo cual ya sería importante en sí mismo). También permite que nuestras facturas vengan más bajas y de esa forma se proteja el presupuesto familiar. Al seguir las siguientes recomendaciones verás que pronto disminuirán tus gastos energéticos.

• Asegúrate siempre de desconectar cualquier posible fuente fantasma. Aunque estén apagados, los dispositivos que usamos se mantienen consumiendo energía si no los quitamos de la corriente.
   
• Cuando estás trabajando en la PC y necesitas salir un momento, no olvides escoger el modo de hibernación, en lugar de dejar la máquina prendida con el protector de pantalla. Esto, aunque no lo parezca, continúa gastando energía.
   
• Tanto si vas a lavar la ropa como a fregar la losa, procura que los equipos estén llenos para evitar un gasto excesivo de energía y de agua.
   
• A veces gastamos más energía calentando el agua que en el mismo proceso de lavado. A menos que sea muy necesario, siempre es preferible usar el agua fría y aplicarle a la ropa manchada los diversos detergentes blanqueadores que hay en el mercado.
   
• Elije bombillos ahorradores frente a los convencionales, usan sólo un porciento de la energía y tienen una durabilidad muy amplia (22 años).
   
• El color que le pongas a las paredes de la casa puede ayudarte a economizar energía. Muy simple: los tonos claros iluminan los espacios, de modo que no hay necesidad de prender la misma cantidad de electricidad que si todo luciera oscuro.
   
• Intenta minimizar el uso de los climatizadores. Eso no significa que no los utilices nunca, sino que lo hagas de manera racional configurando el termostato para que estabilice la temperatura.
   


• Las ollas eléctricas economizan mucho más la corriente que los hornos o fogones eléctricos. Salvo que necesites preparar alguna receta específica, empléalas con más frecuencia en la confección diaria de los alimentos familiares.

Abre ventanas para que la luz y el aire entre a raudales. La casa será más fresca e iluminada, sin necesidad de usar todo el tiempo los dispositivos electrodomésticos.